Un hombre va a ver al Papa. "Su Santidad. Trabajo para KFC y le ofrecemos diez millones de dólares por cambiar la lectura del Padrenuestro de 'Danos hoy nuestro pan de cada día' a 'Danos hoy nuestro pollo de cada día'".
El Papa está horrorizado. "¡No puedo andar cambiando la palabra de Dios por dinero!".
El hombre dice: "¡Cincuenta millones! ¡Piense en todo el bien que la Iglesia podría hacer con todo ese dinero, Su Santidad!".
El Papa no se impresiona. "Ya se lo dije. Simplemente no puedo. Lo siento".
Así que el hombre dice: "Bueno, oferta final: 100 millones de dólares. Tómenlo o déjenlo".
Al día siguiente, el Papa reúne a todos los líderes en el Bati-cano y les dice: "Caballeros, tengo buenas y malas noticias. La buena noticia es que hemos recaudado 100 millones de dólares para Caridades Católicas". ¡La sala estalla en vítores!. ¡Ehhh!. ¡Síiiii!. ¡Que Viva el Papa!. ¡Chíquiti Bum a la ... (Ok,esto no)
El Papa espera a que se calme la sala y luego dice: «Y ahora, la mala noticia: Perdimos la cuenta del Osito Bimbo».