A nadie le gusta ser maltratado, o juzgado.
Pero como cristianos, Jesús mismo sufrió condenación por parte de los líderes de su pueblo.
Que estaba endemoniado, que estaba loco ,que tenía poder a través de belcebú.
Él dijo si con el árbol verde hacen esto? que no eran con el árbol seco?
Y si a mí me han llamado endemoniado a ustedes que son mis seguidores con mayor razón los maltratarán y perseguirán, pero no tengo yo he vencido al mundo.
En el mundo tendrán aflicción.
En paz os doy, mi paz os dejo.
Así que Jesús siempre nos advirtió que íbamos a sufrir persecución es inevitable tener que sufrir agravios, condenaciones, maltratos injustificados.
Pero si sufrimos por hacer el bien somos bienaventurados.
Nuestro galardón es grande en los cielos.
No debemos sufrir castigo por ser chismosos, entremetidos, cometer algún tipo de pecado.
Pero si sufrimos por causa de la palabra de Dios, Entonces debemos alegrarnos.
Es algo muy fuerte y profundo pero esa es la fe verdadera.
Pues a mí me han juzgado Por no querer fornicar, por no querer imitar, lo que todo el mundo pecaminoso hace.
Me han juzgado por predicar y por decir lo que Dios me ha revelado. Me han dicho que estoy loca o que soy una p...
Me han dicho que soy una bruja ,me han dicho de todo.
He sufrido bastante por causa de mi fe.
Si me gusta o no me gusta?
No, obvio. Pero
Jesús ya me lo advirtió no tengo de qué quejarme.
Sí ya me metí en esto tengo que seguir hasta el final.
Sufro, lloro ,me enojo. Después recuerdo las palabras de Jesús bendice a tus enemigos ,ora por tus enemigos, Por los que te persiguen, si tu enemigo tiene hambre, dale de comer dale de beber.
Tengo paz.
Qué de extraordinarios es que amemos a nuestros amigos?
Hasta los pecadores aman a sus amigos.
Pero Dios nos llama ser extraordinarios amando a nuestros enemigos.
No es fácil ,pero con clamor, ayuno ,oración y lectura bíblica todo es posible por El poder del Espíritu Santo.