Para no ir al infierno, solo tienes que aceptar a Jesucristo como tu salvador personal, reconocer tus pecados, arrepentirte, pedirle a Jesús que te cambie. porque tú quieres cambiar.
El justo se salvará por fe, no por obras.
Porque no hay ningún justo ni aún una solo.
Pero si una persona no quiere cambiar y le gusta vivir lejos de Jesús y muy cerca al pecado... no hay nada más que hacer solo orar por él ...en una distancia muy muy lejana...