La humanidad ha cambiado por primera vez con éxito y a propósito el curso de un cuerpo celeste. Esto hace que la misión DART de la agencia espacial estadounidense NASA sea un éxito. A finales de septiembre, el satélite DART se estrelló contra el asteroide Dimorphos
Durante las últimas dos semanas, el equipo de investigación de la misión Prueba de redirección de doble asteroide (DART) analizó los datos y confirmó que la órbita del asteroide se vio alterada por el impacto.
“Esta misión muestra que la NASA está tratando de estar lista para lo que sea que el universo nos arroje. La NASA ha demostrado que nos tomamos en serio la defensa del planeta", escribió el jefe de la NASA, Bill Nelson, en un comunicado de prensa
La misión costará un total de 330 millones de dólares y el desarrollo del satélite tomó siete años. No es más grande que una máquina de refrescos y voló directo a Dimorphos a 22.531 kilómetros por hora. Ese impacto cambió su curso, permitiendo a los científicos medir en observatorios de todo el mundo.
También un toque belga a DART
Científicos del Observatorio Real de Bélgica (ROB) participan en el procesamiento de los datos de DART. El análisis de los datos de esta misión les permitirá comprender mejor el interior de los asteroides.
Dentro de cuatro años, la misión HERA de la Agencia Espacial Europea observará más de cerca el cráter que dejó DART y hará una medición exacta del asteroide. Los científicos belgas también están involucrados en esto.
La NASA enfatiza que Dimorphos nunca representó una amenaza para la Tierra, incluso después de la colisión con DART.