Me pasa al revés. Me cuesta dar hasta un abrazo, imagínate decir un "te quiero". Muchas veces las parejas que he tenido me han dicho que soy frío, que no se querer, etc. Me cuesta ser demostrativo, y ser así lleva a pensar que soy una persona desalmada. Un "no te quiero" me saldría naturalmente, sin detenerne a pensar si estoy lastimando a otro. Es una chotada ser así, pero lo admito.