Disculpen, no es insulto, sólo le pregunté a la IA sobre una tarea urgente para mañana acerca de los tipos de personalidad y su correspondiente criatura de la escala zoológica, más o menos con cuál nos identificamos y salió la siguiente descripción:
Las Chinchillas – Los de carácter débil
Siempre nerviosas, siempre suaves. Si les levantas la voz, se desmayan. Prefieren esconderse detrás del sofá antes que enfrentar una discusión. Si pudieran, vivirían en una nube de pelusa y paz.
Los Leones – Los líderes natos
Llegan a una reunión y automáticamente parecen el jefe, aunque sea una junta del grupo de WhatsApp. No piden respeto, lo exigen con la mirada. Dan miedo... pero también seguridad. Si ruge, mejor hacerle caso.
Las Tortugas – Los pacientes eternos
No tienen prisa. Nunca. Si dices “¡Rápido, que cerramos!” te responden “tranquilo, la vida es una maratón”. Meditan antes de elegir entre Coca o Pepsi. Les ganan las abuelitas en la fila del banco.
Los Monos – Los hiperactivos y bromistas
No pueden estarse quietos. Rebotan entre conversaciones, ideas y muebles. Siempre están tramando una broma o riéndose de la suya. Son el alma de la fiesta... hasta que tiran la torta.
Las Serpientes – Los controladores sutiles
Nunca los ves venir. Hablan despacito, con voz suave, pero cuando menos lo esperas ya te convencieron de hacer su tarea. Son fríos, calculadores y siempre tienen un "plan B" (y C, y D).
Los Perros – Los leales y protectores
Si eres su amigo, te cuidan como si fueras hueso premium. Son nobles, a veces un poco intensos, pero siempre están cuando los necesitas. Gritas "¡ayuda!" y ya están ahí con palas, cuerdas y snacks.
Los Gatos – Los independientes y misteriosos
No siguen reglas, siguen su agenda personal. Si los necesitas, puede que aparezcan... o puede que estén tomando sol en el techo. Son elegantes, algo egocéntricos, pero fascinantes. Nunca sabes si te aman o te toleran.
Los Elefantes – Los sabios y emocionales
Recuerdan TODO. Desde tu cumpleaños hasta esa vez que les hiciste mala cara en 2009. Son sensibles, profundos, y cuando hablan... todos escuchan. No son de muchos amigos, pero los que tienen, los cuidan como oro.
Los Patitos – Los inocentes y adorables
Van por la vida con ojos brillantes y una sonrisa permanente. Creen que todos son buenos y que el mundo es un lugar lleno de arcoíris y cupcakes. Hay que protegerlos de las serpientes, pobres.
Los Loros – Los habladores compulsivos
Hablan. Y hablan. Y siguen hablando. Si les das cuerda, te cuentan su vida, la tuya, y la de sus primos. Te llaman por teléfono “solo para saludarte”... 2 horas después, tú sabes hasta el nombre del perro de su vecino.