Me pasaron una hoja para adjuntar mi firma con el propósito maldadoso de sacar a un jefe de la sección de Contabilidad. Me obligaron a firmar así que lo hice. Afortunadamente el pedido no fue aprobado por la alta gerencia y el jefe continuó con nosotros. Era un señor mayor con carácter cascarrabias, él sabía quiénes eran los promotores de esa lista así que perdonó al resto que firmó porque supuso que fuimos obligados por los delegados de la oficina y el sindicato.